miércoles, 8 de abril de 2015

Retortillo de Soria a Atienza


Hola amigos !

Hoy he podido desayunar antes de partir hacia el que será el final de la ruta: Atienza. El final del Camino del Destierro. ¡Loado sea el Señor!

Cantar:
"En cuanto sea temprano, cebada a las bestias dad.
Luego que coma el que quiera y los que no a cabalgar.
Esa sierra tan bravía la tenemos que pasar
y a la noche ya las tierras del rey quedarán atrás.
Luego el que quiera buscarnos dar con nosotros podrá"

Dejo atrás Retortillo de Soria cruzando la puerta del Este y, caminando por senderos sinuosos, voy ganando altura hasta alcanzar aproximadamente los 1400 metros. Estoy en el alto de la Carrascosa, en la sierra de Pela, en la frontera entre Soria y Guadalajara, en lo que fue la frontera del reino de Castilla y la Taifa de Toledo.

Vista desde el alto de la Carrascosa, en la sierra de Pela
No puedo evitar mirar hacia atrás y contemplar esas planicies infinitas que he recorrido paso a paso, día tras día. Quizá el Cid y los suyos hicieron lo mismo en su momento, girando sus cabezas con nostalgia hacia Castilla, para contemplar por última vez, estas mismas tierras.
Se cumplía el plazo decretado por Alfonso VI para que el Cid saliera de sus dominios. Se cumplía el noveno día... El destierro ya era una realidad.

Cantar:
De noche pasan la sierra, llega la mañana ya
y por esa loma abajo empiezan a caminar.
En medio del alto bosque que allí en la montaña está
manda acampar Mío Cid y pienso a las bestias dar.
Dice a sus hombres que aquella noche tendrían que andar
y ellos, tan buenos vasallos, por muy contentos se dan
que todo lo que les mande su señor ellos lo harán.
Antes del anochecer empiezan a cabalgar para que no les descubran quiere el Cid de noche andar.
Toda la noche anduvieron, ningún reposo se dan."


Miedes de Atienza

Esta localidad tuvo su importancia histórica. Sus casas señoriales y blasonadas, como las de la Inquisición o Beladí­ez, dan fe de ello.

También posee una monumental iglesia parroquial del siglo XVIII


Romanillos de Atienza

Como su patrimonio más importante se encuentra la iglesia románica del siglo XIII.


Atienza

La llegada a través del Camino del Cid es esplendida. Se divisa la ciudad a kilómetros de distancia, y por ello la aproximación tiene su magia, por la sensación de hacerlo a cámara lenta, debido al tiempo que se tarda en alcanzar el recinto amurallado.

En ésta localidad he visitado:

- Castillo. Construido por los árabes, está ubicado en la parte más elevada de la ciudad, sobre una estructura rocosa. Cuenta con torre del Homenaje, de dos pisos y escalera interior, que permite acceder a lo más alto de la fortaleza.  A su alrededor, un recinto amurallado...
Castillo roquero de Atienza
Está declarado Monumento Nacional, aunque su conservación deja mucho que desear. He visto bastante suciedad, tanto en el interior como en el exterior del castillo. El desinterés por parte de quién corresponda es manifiesto.

Este tipo de castillo se llama roquero, o castrum, y se encuentran en zonas montañosas. Estaban concebidos como casa-fortaleza para albergar y proteger al Señor de las tierras circundantes, y tenía una finalidad de defensa, debido a las constantes guerras territoriales.

- Iglesia de Santa María del Rey. Edificada al pie del castillo. Es el templo románico más antiguo de los conservados en Atienza.

- Iglesia de Santa María del Val, situada a la entrada de la ciudad.

Vista de Atienza desde el Castillo
Fin de la ruta
Hoy en Atienza, doy por concluido el Camino del Destierro o Camino del Deshonor, como también se le conoce. Déjo al Cid y a su mesnada situados en Tierras de Frontera, muy probablemente el lugar más peligroso de la península Ibérica en esa época, en la Edad Media..., un lugar marcado por la continua confrontación entre moros y cristianos, que habría de prolongarse en el tiempo otros cuatro siglos más, en lo que se conoce como la Reconquista.

Esta era una zona de supervivencia. Ciudades como Sigüenza, Medinaceli, Castejón de Henares, o la propia Atienza, formaban parte de lo que se conoció como Tierras de Frontera. Pero esa, es otra historia..., otro capítulo en la apasionante y larga travesía del Cid.

Quiero también dejar aquí una referencia sobre el lugar donde me he alojado en esta ciudad: El Mirador de Atienza http://elmiradordeatienza.com/ 
Desde que he llegado, su dueño, Carmelo, se ha mostrado muy amable conmigo. Con él he compartido varias horas de nuestro tiempo, hablando de todo un poco, y del Camino del Cid en particular. Este es un lugar frecuentado también por cazadores. Gracias por tu atención y buen hacer. Nos veremos nuevamente cuando retome el camino Tierras de Frontera.

Un abrazo



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